¡Holi, holi amigas! ¿Qué tal? Espero que el mes de Marzo esté siendo estupendo para todas ustedes, se acerca primavera y me sienta muy bien pensar en ello.
Cómo ven en el título, os vengo a reseñar el último libro que leí, una lectura bastante ágil y amena, de esas que puedes leer en una tarde pero que dejan un mensaje súper bonito detrás.
El caballero de la armadura oxidada, ilustrado en su interior, no se define como un libro..., sino como una experiencia que expande nuestra mente, que nos llega al corazón y alimenta nuestra alma. Sus profundas enseñanzas éticas son de una sencillez y humildad tal que se consiguen interiorizar naturalmente y la riqueza de su prosa nos inunda de belleza.
El protagonista, un caballero deslumbrado por el brillo de su propia armadura, a pesar de ser bueno, generoso y amoroso, no consigue comprender y valorar con profundidad lo que tiene, descuidando sin querer las cosas y las personas que le rodean.
Su armadura se va oxidando hasta que deja de brillar, y cuando se da cuenta, ya no puede quitársela.
Prisionera de sí mismo, emprende entonces un viaje al final del cual, gracias a la ayuda de diversos personajes, logra deshacerse de la armadura que le ha imposibilitado abrirse al mundo. Este nos enseña, con un sutil sentido del humor, que debemos liberarnos de las barreras que nos impiden conocernos y amarnos a nosotros mismos para poder ser capaces de dar y recibir amor en abundancia.
El caballero de la armadura oxidada se divide en 7 capítulos, y a partir del capítulo 3 nuestro protagonista comenzará a caminar sobre el sendero de la verdad para dar paso a abrir las puertas y conocer tres castillos..., "El Castillo del Silencio", "El Castillo del Conocimiento" y "El Castillo de la Voluntad y Osadía". Profundizar en cada uno de estos castillos servirá al caballero para cambiar sus modos de ser junto con otros personajes que le ayudarán en el camino de una forma distinta, en la que él solicitará la ayuda de estos continuamente hasta que se de cuenta de cómo funcionan muchas veces las cosas.
Es alucinante cómo, en muchas ocasiones, nos dejamos llevar por nuestras creencias y, es el caballero la viva imagen de pegarse a ellas, tomándolo como la verdad absoluta.
Al terminar la lectura me quedé con una sensación de haber aprendido algo nuevo, de poder tener la oportunidad de rescatar muchas de las enseñanzas que el autor me ha brindado.
En resumen, es una primera entrega que recomiendo al menos que prueben, aunque estoy segura de que a muchas os va a gustar la experiencia. Se compone de una trilogía y tengo muchas ganas de leer la segunda parte.
¡Muchas gracias por leerme! Nos leemos, amigas.